En cuestión de cerramientos, se puede elegir
Vallar o cerrar el terreno en el que vivimos e incluso uno en el que todavía no hay nada construido, puede ayudarnos a prevenir ciertas complicaciones. Si la parcela no se encuentra debidamente delimitada puede que alguien decida instalarse en ella y ocuparla; aunque por supuesto podremos demostrar legalmente que nos pertenece, el hecho de tener que atravesar por una situación de tales características, no es plato de buen gusto para nadie así es que ¿por qué exponernos?
Por otra parte, si ya tenemos instalada nuestra casa en el terreno, colocar un cerramiento entorno a la misma nos aportará muchos beneficios y tranquilidad además de:
- Mayor privacidad
- Dependiendo del cerramiento que se elija podemos obtener mayor aislación acústica procedente del exterior
- Más seguridad ante posibles saqueos o robos
- Protección del viento y del polvo
- Delimitar con exactitud nuestro espacio para evitar inconvenientes con vecinos
Si decides vallar tu parcela, antes de hacerlo tendrás que informarte en relación a las normativas vigentes para no incumplirlas y también es necesario que tengas en cuenta otros aspectos como por ejemplo; si vives dentro de una urbanización, seguramente tendrás que cumplir con ciertos requisitos y una estética a seguir, quizá no puedas escoger cualquier material, ni color. Por eso lo mejor es que te informes en el ayuntamiento teniendo en cuenta el sitio en el deseas colocar los cerramientos de terrazas. Otro punto a considerar es el de los vecinos si los hay, tendrás que ponerte en contacto con ellos ya que cualquier pared o cerramiento que coloques, inevitablemente pasará a ser de ellos también y es importante que ambos estén de acuerdo.
[bctt tweet=»#CerramientosdeParcelas, además de privacidad tiene más beneficios»]
Opciones disponibles para vallar un terreno
Cerramientos de madera
Son muy atractivos y ofrecen una estética un tanto rural y acogedora. Se trata de listones o tablillas de madera que se colocan en posición horizontal o vertical entorno a la parcela, también las hay en formato enrejado conocido como celosías.
Cercos de hormigón armado
Es de los menos utilizados, aunque cuando se lo instala se suele combinar con otro tipo de material como madera. Su costo es superior a otro tipo de cerramientos, pero en contra partida es muy durable, la humedad no la deteriora tan rápidamente como ocurre con otros materiales y además, ofrece mayor insonorización.
Vallas metálicas
Muchas veces se colocan con formato enrejado, verja, celosía o malla metálica al que se le añaden arbustos del tipo enredaderas o setos, para que no exista visibilidad de la propiedad desde el exterior.
Cerramiento de ladrillos
Esta forma de vallado ofrece un acabado vistoso y elegante; se trata de ladrillos fabricados con barro, vienen huecos o macizos.
Vallar con bloques
Por lo general están fabricados en cemento u hormigón; en relación a la alternativa anterior (ladrillos) ésta es menos atractiva a la vista, ya que los bloques tienen forma rectangular y son grises, por lo que para lograr un cerramiento agradable estéticamente hablando, será necesario revestirlo por ejemplo con yeso u otro material para luego pintarlo.
¿Tienes vallada tu parcela? ¿Qué tipo de material has elegido?