Excederse en la potencia de luz es un coste innecesario, pero no llegar implica no poder hacer tu dia a dia con normalidad. Atención a la hora de demandar un cambio de potencia sin la cooperación de un especialista: el importe de las diversas gestiones podría devorar el ahorro condicional.
Nuestro recibo eléctrico está compuesto por la potencia de luz y el consumo, de manera que estar al tanto de qué potencia eléctrica es la adecuada para nuestra vivienda, nos beneficiará a adecuar nuestro recibo al máximo.
En función de los electrodomésticos que dispongamos y el empleo que hagamos de ellos, necesitaremos más o menos potencia de luz y por consiguiente se verá reflejado en la factura eléctrica.
¿Que es la potencia de luz?
La potencia eléctrica, es la cantidad de energía que una casa puede consumir de manera conjunta. Es primordial tenerlo presente , ya que esto cambia el consumo energético de tu vivienda.
Los mecanismos electrónicos precisan de cierta potencia de luz para funcionar, medida en vatios (W) o Kilovatios (KW). Aunque su consumo, el coste eléctrico, va en función del tiempo de empleo. No es igual utilizar el aire acondicionado diez minutos que cinco horas. Por ese motivo el consumo eléctrico se mide en Kilovatios – hora, (KWh), que es la energía precisa para sustentar un dispositivo de 1 KW en una hora.
En la factura de luz se pagará por dos conceptos distintos, la parte variable que es el consumo eléctrico ejecutado, y la fija o potencia de luz contratada. La potencia es lo que tienes que pagar cada mes, emplees o no la luz.
¿Cómo saber qué potencia de luz tengo que contratar?
Primeramente, hay que distinguir dos escenarios, si la vivienda ya cuenta con suministro eléctrico o si todavía hemos procedido a dar el alta de luz:
- Si no hemos contratado todavía el suministro de luz: Consulta el boletín eléctrico de la casa. El boletín eléctrico es un documento fundamental en todas las viviendas, se trate de una obra nueva o de segunda mano. Certifica que la instalación de electricidad está en perfectas condiciones y reúne todos los requerimientos específicos. Lo emite un instalador autorizado y en él se refleja la potencia máxima a contratar, el tipo de instalación, la potencia aconsejada.
- Si ya disponemos de suministro de luz: Si la potencia que está contratada es mayor a 15 kW, el maxímetro del contador reúne cuál es la petición máxima de cada mes en nuestro hogar. Si por el contrario es inferior a 15kW, hay considerar circunstancias como:
- Cuántos electrodomésticos tiene la vivienda
- Cuanta potencia necesita cada uno de ellos
- Cuantos aparatos eléctricos vamos a conectar simultáneamente
- Si tenemos vitrocerámica, secadora, calentadores eléctricos
- Saber que clase de instalación eléctrica tenemos; monofásica o trifásica porque de ello variará la potencia que podamos contratar. En la actualidad, la mayoría de las casas disponen de un sistema monofásico.
Otra forma para saber qué potencia contratar, es acogernos al proceso de prueba y error por la cual ponemos en funcionamiento todos los aparatos eléctricos de manera paralela para ver si salta el interruptor, lo que generalmente identificamos como los plomos. Si el interruptor lo soporta, significa que tenemos una potencia contratada más alta a la que precisamos y, por consiguiente, podremos aminorarla y economizar algo de dinero.
¿Qué potencia de luz debo contratar?, Tabla de potencias normalizadas
Déjate asesorar por los profesionales
Si crees que tu potencia no es la correcta, te aconsejamos pedir ayuda técnica a un instalador acreditado, quien comparará los antecedentes de tu vivienda y evaluará todas las necesidades con la máxima delicadeza.